sábado, 26 de diciembre de 2009

Maldito el amor

Maldito el amor


Maldito el amor perdido.
Maldito el amor buscado.
Maldito el amor no correspondido.
Maldito el amor no encontrado.

¡Maldito seas, amor, eternamente!

Maldito el amor arrepentido.
Maldito el amor olvidado.
Maldito el amor prohibido.
Maldito el amor imaginado.

¡Maldito seas, amor, eternamente!

Maldito el amor corrompido.
Maldito el amor obstinado.
Maldito el amor herido.
Maldito el amor cicatrizado.

¡Maldito seas, amor, eternamente!

Maldito el amor caído.
Maldito el amor levantado.
Maldito el amor defendido.
Maldito el amor atacado.

¡Maldito seas, amor, eternamente!

Maldito el amor ofrecido.
Maldito el amor premiado.
Maldito el amor recibido.
Maldito el amor castigado.

¡Maldito seas, amor, eternamente!

Maldito el amor recién nacido.
Maldito el amor enterrado.
Maldito el amor percibido.
Maldito el amor ignorado.

¡Maldito seas, amor, eternamente!

Maldito el amor inadvertido. 
Maldito el amor sospechado.
Maldito el amor reprimido.
Maldito el amor acusado.

¡Maldito seas, amor, eternamente!

Maldito el amor padecido.
Maldito el amor celebrado.
Maldito el amor escondido.
Maldito el amor revelado.

¡Maldito seas, amor, eternamente!

Maldito el amor protegido.
Maldito el amor sacrificado.
Maldito el amor presumido.
Maldito el amor avergonzado.

¡Maldito seas, amor, eternamente!

Maldito el amor admitido.
Maldito el amor negado.
Maldito el amor infundido.
Maldito el amor equivocado. 

¡Maldito seas, amor, mil veces
en tiempo eterno y en espacio infinito
Amor de amantes, caros diamantes...
¡Maldito!¡maldito!¡maldito!

  Elio G.

El Fuego del Amor

El Fuego del Amor


Centella de amor con que Afrodita
Adorna las diestras saetas de Eros.
Funde hasta el más frío de los aceros,
El sutil fuego ardiente que crepita.

Rosa flamígera que dormita
En el seno de los dones meros,
Emulando áureos discos viajeros,
Alabando las venas donde habita.

Mas el ser mil veces engañado
Siente en su pecho un fuego destructor.
Lo que era amor amado y amador
Se torna matador y matado.
Premio, precio, castigo o pecado
Es sanar y ser apuñalado.

Elio G.

martes, 3 de febrero de 2009

Espacios Vacíos

Espacios Vacíos


He bajado de la cruz,
he roto las cadenas,
he salido de la caverna,
guiado por la luz.

He roto los puertas
y los vitrales de mi templo.
Sólo he dejado en pie
las dulces campanas.

He destruido
las máscaras
de los ídolos paganos
que ocultan la verdad.

He bebido del cáliz,
el néctar y la ambrosía.
Una embriaguez divina
irrumpió en mi corazón.

Las letras muertas
se han convertido
en jeroglíficos vivos
que leen mi mente.

Colores iridiscentes,
sonidos fragorosos,
perfumes aleatorios,
formas siderales.

Todo se ha amalgamado
caóticamente formando
una sinfonía extraña
para advertirme
que un gigante cósmico,
eterno, infinito y omnímodo,
habita en los espacios vacíos.

Elio G.

Jesucristo Urbano

Jesucristo Urbano


En la vereda de enfrente,
en el rincón del mundo,
entre celestes azoteas
y oscuros sótanos,
me encuentro
cargando una cruz
a mis espaldas.
Fulano se burla de mí,
Mengano llora por mí,
Zutano me envidia
(esa es la hermana Humanidad).
No sé realmente quién soy,
de donde vengo y a dónde voy,
sólo sé que tengo un don
que es una maldición.
Es la marca de fuego,
el tatuaje que llevaré
durante todo el camino.
Recibo aplausos por mi valor
y lágrimas por mi suerte
mas también me dan escupitajos
por haberme sacado la mascara.
Son infinitos los espacios,
son eternos los tiempos
en los cuales seré y estaré.
Mejor tomar
un poco de sagrado pan
y una copa de santo vino
para seguir viaje.
Yo soy el que soy,
soy todos y soy nadie,
pero simplemente
y complejamente
soy yo.


Elio G.